Por Nicolás A. Jerkovic, Director de EKOSOS (*)
(*) Este artículo fue publicado por el Cronista, en el suplemento «Apertura Negocios», el 18-08-2019. Fue escrito junto a la Dra. María Marta Panario Centeno.
Un buen rendimiento financiero ya no es el único criterio que están considerando los inversionistas a la hora de tomar sus decisiones de inversión. La consideración de factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo es cada vez más relevante en la valorización de empresas para invertir. En los dos últimos años, la creación de fondos éticos, la adopción de inversiones responsables y los inversores que consideran dichos factores creció más del 60%, según la Global Sustainable Investment Review.
De esta forma, los temas de sostenibilidad y desempeño financiero comenzaron a entrelazarse. Reguladores y empresas han respondido al desafío.
Las empresas emisoras están siendo llamadas a socializar el desarrollo sostenible de la economía. En línea con las nuevas exigencias del mercado y las regulaciones, las empresas están respondiendo al desafío aportando más y mejores datos de su gestión vinculados a los impactos sociales y
ambientales de sus actividades, fortaleciendo la transparencia, la rendición de cuentas y las buenas prácticas sostenibles.
En lo que respecta a los reguladores, estudios e investigaciones a nivel internacional muestran cómo el mercado de capitales puede ser un buen vehículo para diferenciar empresas y canalizar preferencias de los inversores que buscan la sostenibilidad en sus decisiones de inversión. Estos estudios también reflejan que las bolsas de valores y los organismos reguladores están asumiendo su compromiso y responsabilidad de fomentar la responsabilidad de las empresas con la sostenibilidad diseñando índices para compañías que se destacan en sostenibilidad, redactando lineamientos para la emisión de valores negociables verdes, sociales y sustentables (conocidos como bonos verdes) y, solicitando información no financiera referida a temas ambientales, sociales y de gobierno.
En el ámbito del mercado financiero global, en el año 2009 se crea la Iniciativa de las Bolsas de Valores Sustentables de las Naciones Unidas (SSE, por sus siglas en inglés), con el fin de fomentar enfoques de inversión responsable y de transparencia corporativa. Actualmente, la iniciativa está integrada por más de 70 bolsas, entre las que están los mercados bursátiles de Nueva York, Londres, Fráncfort y Johannesburgo, y en América latina, entre otros: México, Colombia, Brasil, Lima, y Argentina.
Respecto a la Argentina, la sostenibilidad se hizo lugar y en diciembre de 2018 cuando la Bolsa y Mercados Argentinos (BYMA), junto al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), lanzó un Índice de Sustentabilidad que permitirá identificar y destacar a las empresas líderes en materia Ambiental, Social, de Desarrollo Sustentable y de Gobierno Corporativo. La Comisión Nacional de Valores (CNV) publicó en el Boletín Oficial de marzo de 2019 una guía con lineamientos para la emisión de bonos verdes, es decir valores negociables cuyos fondos son destinados a proyectos con impacto social o ambiental positivo.
Con todo lo anterior, cada vez más se hace indispensable que las currículas académicas y las líneas de investigación aborden los desafíos que implican el Desarrollo Sostenible en la Argentina y en el mundo, en pos del desarrollo de las competencias técnicas y profesionales que demanda el siglo XXI.